Tu rostro es el espejo del alma donde se materializan tus emociones y actitudes, estando propenso en todo momento a reflejar diversos indicios propios de la edad.
No todos los trucos y productos embellecedores son efectivos e iguales para todas las mujeres, pues estos van a depender del tipo de piel y la edad que tengas. Generalmente, con el pasar de los años tu piel sufre ciertos cambios, en cuanto a la elasticidad, manchas y la aparición de pequeñas marcas de envejecimiento, causados por la acción de diversos radicales libres a los que es expuesta. Una excelente forma para combatirlos es, reinventarse las técnicas de cuidado para el rostro.
El maquillaje es uno de los factores que más inciden en el cambio de la textura de tu piel, es por ello que debes tomar en cuenta qué tipo de maquillaje debes aplicar y cuáles serían los productos de belleza acordes a tu edad, ya que dependiendo de esto el daño puede llegar a ser mayor, claro no siempre es necesario recurrir a tratamientos tan severos, en ocasiones el buen cuidado de la piel ayuda a evitar daños con el pasar del tiempo.
De 15 a 20 años, en esta etapa de la vida el cuidado deber ser mínimo, pues el rostro se encuentra sano y en las mejores condiciones. Lo indicado para las chicas que se encuentren en este rango de edad es, evitar colocarse exceso de maquillaje y proteger su rostro con protectores solares que contengan nutrientes y humectantes naturales. Otra excelente idea es aplicar todas las noches mascarillas de pepino o sábila, que a lo largo ayudan a reforzar la elasticidad del rostro y evitan que sufran de arrugas o manchas con el pasar del tiempo.
De 20 a 35 años, para esta edad es recomendable evitar los maquillajes de acabado brillante. Por lo general el cutis de las jóvenes siempre se mostrará brillante por sus aceites naturales. Una posible opción para mantener el rostro cuidado y en perfecto estado es evitando utilizar formular formulas fluidas que sean excesivamente espesas, pues las mismas dificultan la libre oxigenación del rostro y la respiración de la piel. Siguiendo estos pasos lograrás disminuir la producción de grasa sudor en tu cara.
Te convienen aquellos productos libres de aceite, ya que en su mayoría te dan una apariencia natural y no recargan de grasas tu piel. Si empleas maquillaje, la opción más sencilla es utilizar polvos compactos, esto debes hacerlo con una esponja humedecida
Aunque muchas mujeres consideran que los 20 años son perfectos para utilizar cualquier tipo de maquillaje por sentirse jóvenes se equivocan, es importante que para esta edad las jóvenes no utilicen tonos agresivos o exagerados, porque dramatizaran tus facciones lo que resulta poco atractivo ya que da un aire de mujer mayor que no deseas en esta etapa de tu vida.
De 35 a 45 años, ya en esta etapa el cutis se encuentra un poco más maduro y muchas mujeres por diferentes responsabilidades que han tenido que afrontar, se han visto en la posición de abandonar su cuidado personal. Por eso lo más aconsejable es que tomes en cuenta lo necesario que es poder mantener una buena relación con tu piel y cuerpo.
Como primer paso deberás evitar los maquillajes oscuros porque afianzan mucho más las facciones de tu rostro. Lo que te podría convenir son las gamas frías como las bases beige azuladas y los rubores de color fucsia. Evita las texturas muy planas o mates esto para mantener un aspecto natural.
Te recomendamos utilizar productos que aporten luminosidad a tu piel, ya que con el pasar de los años la regeneración celular es mucho más lenta, por lo que el cutis tiende a lucir con un tono más apagado.
A partir de los 30 años conviene tratar la piel en función de tipología bien sea: seca, grasa o mixta. Asimismo, es importante escoger cosméticos con ingredientes estimulantes de las funciones básicas del metabolismo celular para así disminuir el proceso de relajación de las células cutáneas lo que lleva a flacidez. La piel a partir de esta edad, requeriría una dosis de vitaminas y minerales en grandes proporciones.
De 35 a 45 años, el cuidado para estas edades debe ser mayor, ya que a medida que pasa el tiempo los nutrientes del rostro se van perdiendo. Lo más lógico para combatir este tipo de daños es aplicando diariamente cremas humectantes o aceites naturales. En la actualidad existen muchos productos para la piel que ayudan con la naturalidad de la misma, algunos de ellos incluyen efectos tensores, que al poco tiempo de ser aplicados logran que el rostro luzca alisado y nutrido.
A partir de los 40 años, lo apropiado será estimular las funciones de las células cutáneas al máximo, de tal forma de evitar que empiecen aparecer los primeros signos de envejecimiento, en vista de que en esta edad el desgaste de la piel sale a flote, relajándose los tejidos cutáneos, para esto lo más adecuado es el uso de tratamientos tensores, tipo lifting por ejemplo. Es muy importante que evites el empleo de texturas oleosas, que dejen aspecto brillante, así como también aquellas fórmulas espesas. Los sérums regeneradores son un aliado excelente para combatir el envejecimiento de tu piel y recuerda que se recomienda también usar cremas reafirmantes para el cuello y escote.
Complementa tus Tratamientos
Una excelente opción para reforzar los logros que puedes conseguir con estos tratamientos especializados es utilizando mascarillas frutales tales como:
- Mascarilla de cambur.
- De lechosa o papaya.
- Melón.
- Aguacate
- Papas
- Pepino